Nueva "Guerra del narco" en Guaymas y Empalme
+ Comenzó en el valle y ya llega a todas las colonias con muertos y heridos
GUAYMAS, Son.- En los ambientes policíaco se habla de la “nueva guerra del narco”.
Habría comenzado en el valle de Guaymas-Empalme, con la tortura y muerte de un joven a quien robaron su auto; posteriormente se divulgó un video donde el presunto asesino confesaba su crimen y más tarde, lo encontraron sin vida dentro de un vehículo abandonado en la Central C-4, en el estacionamiento del Cuartel de Bomberos Norte.
El hecho recordó situación parecida, cuando un auto fue abandonado en el estacionamiento del Comandante de Policía y Tránsito, con tres cuerpos desmembrados.
Esta vez, se añadió una “narcomanta” acusando al titular policíaco y varios de sus comandantes operativos, de recibir dinero y otorgar protección a grupos criminales.
LOS CRÍMENES
La “Nueva guerra del narco” regional, dicen los expertos en nota policíaca, inició el domingo, al hallarse el cuerpo de Iván Antonio Salazar Orozco, de 17 años, quien fue torturado ferozmente y luego asesinado.
Le habían robado su auto, encontrado apenas el jueves al anochecer en el sector Guaymas norte.
Se señalaba a otro joven, y el motivo habría sido un asunto de droga. La Policía no da información, pero enfrenta el reto de criminales, cuando le abandonaron un auto con el motor y refrigeración encendido; dentro, había una persona sin vida y una manta con la leyenda acusadora de corrupción contra el comisario de seguridad Pública, Andrés Humberto Cano Ahuir, y su comandante operativo Alán Zataráin, quienes no han explicado su posición a la sociedad.
Aludía la manta al joven asesinado en el valle y a su presunto asesino, quien estaba allí, en el auto, sin vida, con graves lesiones de tortura, identificado como José Adrián Ocampo, quien en una gasolinera comentó de su hecho criminal, sin darse cuenta que lo videogrababan y más tarde el video fue subido a redes.
SOBREVIENEN ATAQUES
Martes y miércoles hubo muertes violentas en el puerto, pero no se les vincula con las anteriores, aunque sí con el crimen organizado por los mismos motivos.
Pero el jueves, tras el auto con la narcomanta y el cuerpo dentro, la secuencia fue un ataque que resultó mortal en Las Golondrinas, al oriente. Dos horas después moría Ramón Alejandro “N”, de 36 años; casi simultáneo, uno más en Misión del Sol, al sur de la ciudad, donde por segunda vez se agredió a Enrique Rueda, “El Stiven” y ahora está grave en un hospital local; siguió un cateo sin resultados en una vivienda de “El Chorizo”, también al sur, e indagaciones sobre disparos en “El Caliche”, en el centro.
Cerca de la media noche, en Empalme, en colonia Bahía del Sol, arrojaron a dos jóvenes sin vida con leyenda en cartulina que los acusaba de ladrones. “Me pasó por rata”, señala el texto sobre el cuerpo de uno de ellos, severamente golpeado, como su compañero.
La mañana de este viernes, precisamente en “El Chorizo”, se halló otro cuerpo sin vida, cuyos datos generales eran desconocidos hasta el momento.
NARCOMANTAS
También este viernes, amanecieron “narcomantas” en puentes sobre nivel de la ciudad, con leyendas aludiendo al mismo tema de aquella que se encontró dentro del Hyundai azul abandonado con una persona muerta en el estacionamiento del C-4.
Las redes sociales las difunden profusamente, pero ni por las de ayer, ni por las de este día, ha habido una posición oficial de Seguridad Pública, ni en lo personal por los dos señalados, el comisario General de Seguridad Pública, el capitán de fragata de la Armada de México, Andrés Humberto cano Ahuir, y su comandante operativo Alán Zataráin.
Este último, tres semanas atrás, habría sido perseguido por tres sujetos armados presuntamente para atentar contra su vida. La policía se negó a confirmarlo.
Vinculados o no, entre domingo y viernes, hay siete víctimas mortales y una herida grave. Y presumen policías y “civiles”, que la “guerra del narco local” proseguirá con su suma mortal de los últimos años.